Hola soy Edgard, viajero de nacimiento, coach y psicoterapeuta especializado en hipnosis ericksoniana por elección. Desde que era niño sentí una gran pasión por los viajes, con las novedades que nos presentan, sus retos y aventuras que amplían nuestra mirada. Recuerdo que hubo uno en especial que marcó mi vida para siempre, uno como aquel del joven Skywalker con todo lo que tuvo que enfrentar, aprender y sanar para seguir su llamado a convertirse en quien tanto deseaba. Por ello ahora me dedico a un viaje muy especial: el viaje de autodescubrimiento y sanación en el que acompaño a los demás en su propio camino de transformación y crecimiento personal; de sanación y despertar de su potencial.
Mi Historia
Mi interés (y mi necesidad, como leerás más abajo) en el desarrollo y crecimiento personal me llevó desde 1992 a explorar la mente humana. Apenas era un adolescente cuando tuve mi primer acercamiento con cursos de Dinámica Mental. A partir de ahí fui conociendo diversas prácticas contemplativas que desde entonces me han ayudado mucho a ir cultivando un núcleo de ecuanimidad.
Así poco a poco fui dando diversos pasos en el camino para integrar mi combinación inusual de intereses y habilidades, que yo pensaba era una debilidad más que una fortaleza. Comencé con entrenamientos en Coaching y Constelaciones Familiares. En la parte organizacional cursé un diplomado en Desarrollo Organizacional y Planeación Estratégica.
Cursé Psicología en la UNAM como segunda carrera -cédula 11752230- en el área de Psicología de la salud y realicé una maestría en Psicoterapia Ericksoniana de la que me gradué con mención honorífica, cédula 10240821. También tengo formación en Mindfulness, Psicología Positiva, Neurobiología, Genética Conductual y Neuroliderazgo.
Mucho más allá del "Sí se puede"
En mis inicios en el coaching impartí por varios años talleres enfocados en temas como prosperidad, éxito y liderazgo. Eso sí, nunca me autoproclamé como "motivador profesional", ni como gurú del "Sí se puede", ni de "¿cuántos imposibles vas a alcanzar hoy?", ni nada por el estilo, pues por mis entrenamientos terapéuticos me quedaba muy claro que las dinámicas que nos pueden detener en la vida generalmente son complejas y van mucho más allá de "echarle ganas" y "ser un guerrero".
Mientras, en mi proceso personal, fui dando pasos para ir acomodando muchos temas propios... ¡y vaya que le trabajé! Con cada terapia, taller, curso iba comprendiendo más mi situación a nivel intelectual y en menor medida, iba sanando algunas heridas de las tantas que tenía. Al término de cada uno me decía "ya, esta fue la buena". Yo no lo sabía en ese entonces, pero estaba buscando la "cura de la salvación", algo muy común en quienes vivimos adversidad en la infancia. De pronto mi vida cambió drásticamente por varios años. ¿La razón? Había caído en depresión. ??? ¡Sí!, eso mismo pensé yo en esos momentos. Me sentía fatal por el hecho de dedicarme a una profesión de ayuda y estar deprimido... ¡y a pesar de todo el trabajo personal que ya llevaba! Podrás imaginarte que fueron tiempos poco fáciles para mí pues sentía que lo que ya había palomeado de mi lista de "temas pendientes por resolver" había sido en vano. Más de una vez pensé en tirar la toalla, hasta que un día...
Benditas Neurociencias
Asistí a un evento internacional en Estados Unidos que reúne a reconocidos psiquiatras y psicoterapeutas por sus contribuciones al campo de la salud mental. En ese evento aprendí de muchos temas, corrientes y enfoques, pero hubo dos puntos que fueron un antes y un después para mí:
+ El primero fue la importancia de tener en cuenta al cerebro y al sistema nervioso en procesos de cambio y recuperación, pues cuando se encuentra desregulado, la mayoría de las estrategias de superación personal y autoayuda... poco ayudan (incluso tampoco algunos tipos de psicoterapias que probé en el camino). Esa desregulación puede provocar desde Ansiedad, Depresión (por fin supe el origen profundo y no circunstancial de dónde venía), emociones intensas y a veces desproporcionadas, adicciones, relaciones poco saludables/estables, o como yo lo sentía, una sensación de alerta constante aun si estaba de vacaciones en el lugar más tranquilo del mundo.
+ El segundo tema fue el trauma y la familia adicta, en esta conferencia me cayeron tantos veintes del por qué yo había crecido, precisamente, con un sistema nervioso desregulado. Por fin encontraba respuestas al dolor emocional y al hoyo en el corazón con los que había crecido y que hasta ese momento con todo el trabajo personal que llevaba, sentía que "era un defecto mío". Todo eso que sentía ahora tenía nombre y un origen.
Lo que aprendí en ese evento sobrepasaba -y por mucho- lo visto en la carrera de psicología. Ahora sabía que lo que había vivido no solo tuvo efectos psicológicos, sino también neurológicos. A partir de entonces me dediqué a estudiar cuanto pude acerca del sistema nervioso y cómo regularlo.

Bendita REGULACIÓN y RESILIENCIA
Mi proceso de sanación fue muy curioso pues al ir aprendiendo nuevas técnicas y enfoques para regular mi sistema nervioso, fui también combinándolas con la poderosa hipnosis ericksoniana, lo que aceleró el proceso. Así me fue posible ir cultivando la capacidad humana que nos permite afrontar y recuperarnos de las adversidades que invariablemente todos encontramos en nuestra travesía pues son parte de vivir una vida humana...la Resiliencia.
Al ser una habilidad, al igual que un músculo, puede ejercitarse y cultivarse DELIBERADAMENTE a cualquier edad. Al hacerlo no solo fui saliendo de depresolandia, sino que también fui enriqueciendo mis depósitos de resiliencia que sirven como un "colchón" protector para cuando se presentan las adversidades de la vida.
Muchas veces me pregunté cómo sería mi vida de haber sabido lo que hoy sé sobre Resiliencia, neurociencias y regulación del sistema nervioso cuando estaba en la parte más cruda de la depresión, también cuando fracasó mi primer negocio y en tantas otras adversidades que he encontrado en mi camino. Jamás lo sabré, lo que sí sé es que cultivarla en conjunto con la hipnosis ericksoniana de verdad cambian vidas y con todos estos recursos integré mi propio enfoque que hoy pongo a tu servicio.
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